En la vida de un profesor, cada día, está lleno de retos apasionantes
¿Cómo está siendo tu primer año de trabajo en Munabe?
Está siento un año muy intenso, por la cantidad de nuevos alumnos y familias que he conocido, por mis nuevos compañeros profesores, por todos los proyectos que tiene el colegio y en los que me he involucrado… La verdad es que cada día en la vida de un profesor está lleno de retos apasionantes.
¿Qué proyectos te parecen los más interesantes del colegio?
Bueno, me pones en un compromiso con esta pregunta, porque no me gustaría valorar unos por encima de otros. No quiero menospreciar ninguno, porque creo que todos son complementarios dentro del proyecto global del colegio. Sin particularizar, creo que Munabe en su conjunto, su ideario, el ambiente de trabajo sensacional de los profesores, la calidad de los alumnos y el buen trato que tenemos con las familias es, para mí, el “proyecto” con el que me identifico.
¿Cómo ves el panorama de la educación?
Bueno, veo aspectos en continua transformación, por un lado, y otros que es mejor que no cambiasen nunca. Me explico: en general (ahora sin concretar en Munabe como colegio) veo que hay continuos proyectos novedosos, aumento de tecnología en el aula y fuera de ella, nuevos descubrimientos que parece que podrían cambiar la realidad educativa… Creo que todas esas iniciativas, de las que Munabe incorpora algunas muy interesantes, muestran que la educación es algo en continua transformación, siempre buscando mejorar el aprendizaje de los alumnos, el trabajo de los profesores, la comunicación con las familias… Todos esos cambios son interesantes, siempre que tengamos tiempo y conocimientos para poder incorporarlos a nuestro día a día. Por otro lado, hay muchos aspectos que es mejor que no cambien nunca: la centralidad del alumno, por ejemplo, el trato personal con él, el continuo intercambio de información con los padres en entrevistas personales con ellos… Por mucho que cambien las cosas, las tecnologías o las teorías educativas, las personas no cambian, y tratar con ellas de una en una para verlas mejorar en su aprendizaje es lo que no cambia y no debería cambiar.
¿Cómo valoras la acogida en el colegio, por parte de compañeros, familias, alumnos…?
Pues por hablar de esos tres grupos de personas, debo decir en primer lugar que mis compañeros me han acogido excepcionalmente bien. La verdad es que mis compañeros se han volcado conmigo en mis dudas, facilitándome mi labor en el día a día del colegio, dándome valiosos consejos y ayudándome con experiencias que me han transmitido su saber hacer, su profesionalidad y su cercanía.
Las familias, en segundo lugar, son para mí quienes valoran objetivamente mi trabajo, y en mis encuentros con los padres y madres de mis alumnos he notado la gran confianza que tienen en el colegio. En Munabe nos han confiado a sus hijos, lo más importante que tienen, y me han transmitido la gran responsabilidad que conlleva mi trabajo. Pero las entrevistas con esas familias han sido muy gratas, siempre interesantes, y he podido valorar la necesidad que tienen de escuchar de los profesores cómo trabajamos para ayudar a sus hijos.
De los alumnos, en último lugar, he recibido una acogida muy interesante y que me ha ayudado mucho. Les veo muy integrados en el colegio, muy contentos con sus compañeros y con sus profesores, y eso (lógicamente), facilita mucho mi trabajo.
¿Qué quieres aportar para hacer un mejor colegio?
La verdad es que me encantaría poder aprender de mis compañeros más veteranos muchas de sus experiencias valiosas. Intento incorporar a mi tarea profesional todas las cosas que otros más expertos que yo llevan haciendo ya muchos años en Munabe; para mí son un ejemplo de profesionalidad, y me encantaría aportar al colegio todo eso que me quiero aprender de ellos.
Alguna anécdota simpática de este comienzo de curso…
Recuerdo ahora muchas cosas que han pasado en la sala de profesores o en el aula durante estos meses y que probablemente serán difíciles de olvidar. De todas maneras, las que más ilusión me han hecho son las que tienen que ver con alumnos míos que tenían alguna dificultad en su aprendizaje y que han conseguido vencerla a lo largo de este curso. No me gustaría hacer públicas esas anécdotas aquí, pero son las que más me han conmovido.
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